El castigo divino

Parecía un castigo divino a los que osaron trasladar un festival de música a un sitio que no le correspondía y también a los que como el que escribe asiduo a Villarrobledo tuvo la osadia de asistir al Viñarock en Benicasin.
Nunca había visto de caer tanta agua, ni yo ni nadie del lugar, tiendas de camping navegando por los campos con sus correspondientes sacos y demás neceseres para pasar los días de Festival, evacuaciones de gente ante el riesgo de inundaciones, que luego se cumplieron. En fin una odisea.
Pero también tengo que decir en letras mayúsculas que nunca, jamás había visto tantas ganas de música ante las adversidades de la lluvia, de la organización, que a mi parecer no la hubo fuera del recinto de Benicasim. Así que un hurra para los asistentes al “Benirrock 2007” por su capacidad de aguante y lucha ante las inclemencias del tiempo.
El viernes los conciertos se celebraron con relativa normalidad. El sábado ocurrió la catástrofe en forma de agua diluviante, originando la suspensión de algunos conciertos importantes Mago de Oz, S.A, El bicho, G5, etc. Así que el domingo hubo que improvisar horarios para reubicar a los grupos que no actuaron el sábado. Después de estos ajustes horarios que no fueron acertados, según mi opinión se pasaron grupos que deberían haber estado en hora punta a una hora muy tardía y a escenarios secundarios como el New Rock.